Hoy, 31 de mayo, se celebra el Día Mundial sin Tabaco para concienciar del problema del tabaquismo, una enfermedad crónica que afecta a más de 1.200 millones de personas en todo el mundo y que, según la OMS, provoca la muerte de seis millones de personas al año. Sólo en España hay nueve millones de fumadores y, según la encuesta de salud 2017 , fuman el 25,6% de los hombres y el 18,8% de las mujeres mayores de 15 años. De ellos, según algunos informes, el 80% quiere dejar de hacerlo. Y muchos lo han intentado, pero más de la mitad de ellos, sin éxito.
“El tabaquismo es una enfermedad crónica, adictiva y recidivante; es decir, que provoca adición y recaídas, y a menudo el fumador o su entorno considera y trata este problema como un estilo de vida, no lo asume como una enfermedad y, por tanto, no solicita ayuda al médico ni busca tratamiento, y por eso fracasa” al intentar dejar de fumar solo, por su cuenta, explica José Luis Díaz-Maroto, coordinador del grupo de trabajo de Tabaquismo de Semergen, la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria.