El australiano Brenton Tarrant, autor del atentado supremacista del mes pasado en Nueva Zelanda, fue imputado este jueves por 50 cargos de asesinato -uno por cada víctima mortal- y otros 39 de tentativa de asesinato, un día antes de que el acusado comparezca ante un tribunal.
Tarrant aparecerá a través de un enlace audiovisual para lo que será una audiencia «relativamente breve», anticipó este jueves la emisora Radio Nueva Zelanda.
El juez dijo que Tarrant no tendrá que presentar una declaración de culpabilidad, y que el objetivo principal de la audiencia es establecer algunos asuntos administrativos y la representación legal del acusado, quien rechazó al abogado de oficio que se le había asignado y anunció que se representará a sí mismo.
La Fiscalía buscaría procesarle bajo la Ley de Supresión Terrorista, introducida tras los atentados del 11 de septiembre del 2001 en Estados Unidos, según informó el diario New Zealand Herald, pero para ello necesitará el consentimiento de la Abogacía del Estado.
Los medios de comunicación tendrán derecho a permanecer en el tribunal para la audiencia, pero el juez rechazó 12 solicitudes de medios para filmar, fotografiar y grabar sonido de la audiencia en la corte.
El acusado apareció por primera vez en el tribunal de distrito el 16 de marzo pasado, un día después de los ataques a una mezquita, con un solo cargo de asesinato, pero la policía dijo en un comunicado que otros cargos están «aún bajo consideración».
Dieciséis personas permanecen en hospitales en Auckland y Christchurch después de los ataques armados en que murieron 50 personas el 15 de marzo pasado en dos mezquitas.