Investigadores del Instituto de Física de la UNAM desarrollaron un ultrasonido con el fin de generar imágenes médicas más exactas que les permitan a los doctores distinguir entre lesiones malignas (cáncer) y benignas con mayor facilidad, ya que el cáncer de mama según el INEGI, en sólo el 2017 registró 6 mil 800 decesos.
Iván Rosado Méndez, del Instituo de Física junto con Yolanda Villaseñor, del Instituto Nacional de Cancerología (INCan) trabajan para hacer que el equipo médico convencional mucho más productivo.
La mastografía es el estudio en imagen que ha ayudado a prevenir la mortalidad por cáncer mamario en programas de detección temprana, explicó Rosado a Noticias IFUNAM.
Aunque este estudio ayuda de manera visual a detectar el problema, lo que pretenden Rosado y Villaseñor es que esta herramienta ayude a los médicos en la interpretación de las imágenes y que cuenten con información más precisa al momento de hacer un diagnóstico.
El ultrasonido funciona con una sonda que emite pequeños pulsos de ondas acústicas que hacen que el tejido humano se comprima y expanda continuamente. Y así esas vibraciones se propagan al interior del tejido y generan ecos, los cuales regresan a la sonda con información sobre las propiedades físicas del tejido.
En el caso de un tumor, los ecos son distintos a los demás tejidos, de ahí que de ser detectados generaría un diagnóstico más oportuno.